Bajamos al huerto todos los lunes,
miércoles y viernes. Lo primero que hacemos es dar una vuelta por el huerto, en
la que observamos cómo crecen las cosas que sembramos. Luego nos ponemos manos
a la obra y quitamos hierbas, cavamos, plantamos, sulfatamos o recoger frutos,
preparamos el compost que esto se hace; primero se airea la compostera, se echan
todo plantas que se retiran del huerto, peladuras de frutas y se cubre con
hojas secas, finalmente se riega.
Cuando quitamos las malas
hierbas, cubrimos la tierra con cáscaras de almendra, esto se hace para que la
tierra mantenga la humedad, crezcan menos malas hierbas y cuando se labre
nos servirá para que la tierra sea más esponjosa.
El día que llueve o hace mucho frío, realizamos actividades relacionadas con el huerto, como es cocinar los productos que nos da nuestra huerta, actividades de informática y manualidades.
Como ya llega el frio hemos
quitado las cañas de las tomateras, para poder plantar habas.
Para finalizar nuestras sesiones
regamos y dedicamos diez minutos para relajarnos.